IlustraT - Revolución Mexicana


7. Venustiano Carranza y el Constitucionalismo

Venustiano Carranza y el Constitucionalismo

Entre 1894 y 1904, Venustiano Carranza ocupó diversos cargos públicos. En 1908 fue electo gobernador de su natal Coahuila, pero al no ser bien visto por Porfirio Díaz tuvo que exiliarse; gracias al exilio, en 1910 conoció a Francisco I. Madero, aliándose de inmediato a su causa. Al triunfo de la revolución, Madero lo nombró secretario de Guerra y Marina, cargo que dejó cuando fue elegido gobernador de Coahuila; pero cuando Carranza se enteró del derrocamiento de Madero, abandonó la gubernatura para organizar el ejército del Noroeste, uniéndose a su lucha Plutarco Elías Calles, gobernador de Sonora y, más tarde, Álvaro Obregón.

Amigo de Madero y José María Pino Suárez, Carranza no perdonó sus asesinatos y se propuso reactivar el orden constitucionalista enfrentando al usurpador Victoriano Huerta, iniciando una nueva etapa revolucionaria. A esta lucha se unieron también los ejércitos de Villa en el norte y los de Zapata en el sur.

El ejército del Noroeste, liderado por Pablo González ganó batallas importantes en Monterrey, Tampico, Saltillo y Matamoros; más tarde, en Querétaro, se le unió el ejército de Villa. Gracias a estas batallas Victoriano Huerta se sintió amenazado y renunció a la presidencia de la República el 15 de julio de 1914. El 13 de agosto del mismo año, Obregón ocupó la capital del país, de tal suerte que la coalición recuperó el poder y le otorgó la presidencia provisional a Venustiano Carranza el 20 de agosto.

Plan de Guadalupe

En 1913 Venustiano Carranza lanzó el Plan de Guadalupe, llamado así por la Hacienda de Guadalupe, en Ramos Arizpe, Coahuila, lugar donde se redactó. En este documento desconoció al gobierno de Victoriano Huerta y creó un ejército para derrocarlo y restablecer el orden constitucional interrumpido por el golpe militar. Carranza fue nombrado Primer Jefe del Ejército Constitucionalista.

Para diciembre de 1914 las demandas sociales tomaban fuerza de la mano de villistas y zapatistas. Por lo que desde Veracruz, Carranza expidió las Adiciones al Plan de Guadalupe, donde se comprometía, como Primer Jefe, a poner en vigor todas las leyes y medidas encaminadas a satisfacer las necesidades económicas, sociales y políticas del país, realizando las reformas indispensables para establecer un régimen que garantizara la igualdad entre los mexicanos.

Al derrotar al gobierno ilegítimo de Huerta parecía que la contienda había terminado, pero había grandes diferencias de intereses entre los jefes revolucionarios. A Carranza le importaba sobretodo la integridad y soberanía del país, y con el objetivo de llegar a un acuerdo entre los dirigentes de los distintos ejércitos convocó en octubre de 1914 a la Convención Nacional Revolucionaria, en Aguascalientes. Ahí se aceptó, con limitantes, el programa agrario de Zapata y se le pidió a Carranza que renunciara a la presidencia. Zapata, que había luchado por la restitución de las tierras a sus dueños originarios, no vio satisfechas sus demandas y Villa no recibió las concesiones militares que esperaba de Carranza, así que ambos líderes decidieron mantenerse en lucha, ahora contra el propio Carranza, quien no aceptó los acuerdos de la convención y se marchó al puerto de Veracruz para establecer ahí su gobierno.

En Veracruz, Carranza nombró a Álvaro Obregón como general en Jefe del Ejército de Operaciones, con la misión de recuperar la capital del país, ocupada por el gobierno de la Convención Revolucionaria. Asimismo, el 6 de enero de 1915 Carranza expidió la Ley Agraria, con la que logró restituir gran parte de la tierras arrebatadas a los campesinos y dio paso al surgimiento de instituciones gubernamentales como la Comisión Nacional Agraria.

Los enfrentamientos con Villa y Zapata continuaron hasta que el Ejército Constitucionalista, al mando de Álvaro Obregón, logró derrotar a Villa en Celaya, León y Trinidad, lo que provocó el retiro del Centauro del Norte de la contienda. Por otra parte, Zapata fue dominado y traicionado por Pablo González y Jesús Guajardo, quienes le tendieron una celada el 10 de abril de 1919, en la Hacienda de Chinameca, donde fue acribillado por la espalda.

En 1916 Carranza libro un intento de invasión estadounidense, cuyo pretexto era la entrada de Villa en Columbus. Sería está la segunda vez que defendiera la soberanía nacional, pues en 1914 había logrado la retirada de la armada norteamericana de Veracruz.
En 1916, Venustiano Carranza impulsó la formación de un Congreso Constituyente en Querétaro. De él surgió la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, donde además de los “derechos del hombre”, se incluyeron “derechos sociales”. En este importante documento se decreta la no reelección, se ratifica la soberanía y la organización federal, se instaura la libertad de culto y de expresión, la enseñanza laica y gratuita, convirtiéndose en la constitución política más avanzada de su época, y siendo la Carta Magna regente del país desde febrero de 1917 hasta la fecha. Ese mismo año, en abril, Venustinao Carranza asumió el poder como presidente constitucional. Como tal se negó a participar en la Primera Guerra Mundial, ante la cual México sostuvo el principio de neutralidad. Su gobierno se basó en el respeto a la soberanía de los pueblos y en la no intervención, exigiendo a las empresas extranjeras someterse a las leyes mexicanas. Esta doctrina es ampliada y nombrada en 1930 como la “Doctrina Estrada”, que ha sido la guía de nuestra política exterior.

En abril de 1920, con la sucesión presidencial en puerta, Adolfo de la Huerta y Plutarco Elías Calles aliaron fuerzas y se levantaron en contra de Venustiano Carranza con el Plan de Agua Prieta. Con ellos estaba Álvaro Obregón, quien fuera su general en jefe en los tiempos de la Convención. Venustiano Carranza murió asesinado el 21 de mayo de 1920.



Conoce más sobre las motivaciones de Venustiano Carranza para unirse al movimiento revolucionario.

¿Por qué Venustiano Carranzo se unió al movimiento revolucionario? ¿Qué fue de la Constitución de 1917?